En esta etapa se debe generar una rutina diaria de trabajo académico que se incorpore en la dinámica familiar, es el momento de iniciar hábitos de estudios que les permita realizar las “tareas”, entendidas como una ejecución de actividades o trabajos en un tiempo limitado que les permita afrontar cada vez “tareas” más complejas.
Al momento de ejecutar estas acciones debemos tener en consideración:
- La atención sostenida, que es la capacidad de permanecer realizando una actividad por largo rato.
- La concentración, que es la capacidad de mantenerse focalizado en la acción establecida.
- La memoria, que es la capacidad para recordar y repetir las acciones.
- La tolerancia a la frustración, para permanecer realizando una actividad por complicada que le resulte.
- La planificación del estudio.
- La comprensión de los contenidos que se van a estudiar.
- Las herramientas o técnicas que se utilizarán.
Cómo apoyar para generar hábitos de estudio:
- Habilitar una zona de estudio: mesa, estantería donde estén sus libros y materiales necesarios.
- Establecer el mejor momento que le permita realizar los deberes y estudiar. Es conveniente empezar con periodos cortos (de 10 a 15 minutos) y el máximo de tiempo a esta edad debe ser 45 minutos.
- Establecer una rutina de estudio, donde sea constante con hábitos diarios, valorando su capacidad de trabajo, con rutinas que le den seguridad y sin interferir en lo que establezcan en la medida de lo posible.
- Relacionar sus estudios con sus intereses, ya que prestan mayor atención y están más motivados.
- Planificar y organizar las tareas, se les puede enseñar a realizar una lista de deberes siguiendo un orden, empezando con lo más complejo y terminando con lo más sencillo.
- Los padres pueden apoyar en los trabajos y tareas, esto no implica hacerlas si no responder a sus inquietudes ayudándoles a recopilar la información o a organizarla, de tal forma que se motive a estudiar y aprender.
- Establecer que debe ser constante y que el proceso se termina cuando se ha guardado todo en su sitio (mochila, habitación, etc.).
- No se debe asociar el estudio con premios o castigos, lo que se debe es generar motivación por el estudio.
- Evitar distracciones como la televisión y los juegos.
- Reconocer su esfuerzo y constancia.
Que secuencia establecer para generar una estructura de hábitos de estudios:
- Crear un Plan de Estudio que incluya un calendario de estudio.
- Tomar descansos después de cada 20 minutos realizando actividades que desarrollen otra área neurológica.
- Crear apuntes propios.
- Dormir lo suficiente.
- Realizar preguntas y cuestionamientos, intentando llegar a conclusiones.
- Examinarse regularmente durante el proceso.
- Examinar y aprender a partir de los errores.
- Realizar pruebas y simulaciones similares al examen real.
- Aplicar su conocimiento a problemas reales.
- Continuar con lo que les apasiona
Técnicas de estudio fundamentales que debemos desarrollar:
- Lectura: inicialmente leer de manera exploratorio (primera lectura) y luego realizar una lectura comprensiva.
- Subrayar el escrito donde se responde ¿qué nos quiso decir el texto?
- Realizar apuntes sobre lo subrayado.
- Elaborar mapas mentales, apoya muchísimo a los que desarrollan memoria visual.
- Establecer una ficha de estudio.
- Realizar ejercicios sobre el tema que tienen que estudiar.
- Hacer pequeñas evaluaciones.
- Generar una lluvia de ideas “Brainstorming”, relacionada con el tema de estudio. No resulta útil si no ha leído ni subrayado nada relacionado con el tema.
- Utilizar reglas mnemotécnicas (asociar un término difícil de adquirir con otro conocido).
- Realizar dibujos.
- Hacer grabaciones.
- Ordenar el espacio de actividades.
- Memorizarlo si no existe la posibilidad de anclarlo a otro conocimiento.
- Aprender actividades de relajación (respiración, meditación, yoga).
- Organizar el material de estudio, principalmente aquellas que el niño implementa de forma natural.
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